topografia

Geológicamente, el territorio de Guyana se asienta sobre el escudo guyanés, una formación rocosa que data de la Era Paleozoica, cubierta después por el mar donde se depositaron varias rocas sedimentarias, ocasionando que en la actualidad los restos de esta formación sean sólo pequeñas serranías. El territorio de Guyana presenta una pequeña inclinación hacia el mar, y prácticamente todas las tierras superficiales han sido afectadas por la formación de sedimentos de aluvión.

 

El llano costero, que ocupa cerca del 5% del total del territorio del país, es donde se asienta más del 90% de la población. El llano se extiende con un ancho de cinco a seis kilómetros a lo largo del río Courantyne en el este de la frontera con Venezuela al noroeste del país.

 

El llano costero es una llanura aluvial que se compone en gran parte por el lodo arrastrado hacia el mar por el río Amazonas, llevado al norte por las corrientes oceánicas, y depositado en las costas guyanesas. Este lodo es un limo de gran fertilidad, que se sobrepone a la arena y arcilla formada por la erosión de la roca inferior y del fango llevado por los ríos de Guyana. Debido a que gran parte del llano costero se inunda por la marea alta, desde el siglo XVI se han realizado esfuerzos por drenar el área y contener la marea.

 

Guyana no tiene una línea de playa bien definida o playas arenosas. Conforme se aproxima al océano, la tierra pierde elevación hasta que forma diversas áreas pantanosas. La línea de vegetación próxima al mar es una región de fosas pantanosas y bancos de arena. En Nueva Ámsterdam, estas fosas se amplían hasta casi 25 kilómetros. Los bancos de arena y el bajo nivel del agua son un impedimento importante al tráfico marítimo, y los navíos entrantes deben descargar parcialmente fuera de la costa para poder alcanzar los muelles en Georgetown y Nueva Ámsterdam.

 

Una franja de pantanos forma una barrera entre las colinas de arena blanca del interior y entre las planicies costeras. Esos pantanos se formaron cuando se evitó que el agua fluyera hacia las planicies mediante una serie de presas, que han servido como depósito en periodo de sequías.

 

La franja de arena blanca yace al sur de la zona costera. Esta se extiende entre 150 y 250 kilómetros a lo largo y consiste en colinas bajas de arena blanca con salientes rocosas. Las arenas blancas soportan un denso sistema boscoso. Esta zona arenosa no es cultivable y si los árboles son talados el terreno se erosiona rápida y gravemente. Gran parte de las reservas de Guyana de bauxita, oro y diamantes se encuentran en esta región.

 

Las regiones arboladas más extensas de Guyana se encuentran en las tierras altas. Una serie de mesetas, colinas y sabanas se extienden de la franja de arena a las fronteras meridionales del país. Las montañas Pakaraima dominan la parte oeste de las regiones montañosas del interior. En esta región se encuentran algunas de las más antiguas rocas sedimentarias del hemisferio occidental. El monte Rorima, en la frontera con Venezuela, es parte de la cordillera Pakaraima y, a 2,835 metros sobre el nivel del mar, es el punto más elevado de Guyana. Retirada hacia el sur se localiza la meseta Kaieteur, una área llana y rocosa de aproximadamente 600 metros de elevación. Las montañas Kanuky a más de mil metros de altura y las bajas montañas Acarai, están situadas al sur, en la frontera con Brasil.

 

Gran parte de las zonas elevadas del interior son praderas. La extensión más grande de praderas en toda Guyana es la sabana Rupunini, que abarca cerca de 15.000 kilómetros cuadrados al sur de Guyana. Esta sabana, además, se extiende a lo lejos en el interior de Venezuela y Brasil. Las partes norte y sur de Guyana se encuentran separadas por las montañas Kanuku. Las hierbas ralas de la sabana sólo son aprovechables para pastoreo, sin embargo, grupos indígenas cultivan algunas áreas a lo largo del río Rupununi y en las faldas de las montañas Kanuku.